jueves, 15 de febrero de 2007

El Actor y la Escena


El actor en el espacio dramarico sucede como pieza de construcción de la forma total visual siendo un instrumento de la escena puesta y escrita, por esto el actor no debe ser distante de los elementos basicos y generales de la creación escenica, el estudio y la busqueda de pertenecia de el en la escena y de la escena en el, siendo este encuentro de elementos el bloque basico de la creación dramatica a interpretar. El actor en la escena, ejecuta desde el estado interno en la mayoria de los casos, aun cuando hay elementos de contruccion externa, un actor representativo adopta las herramientas del arte y la imitación, en pinturas como "Las Meninas" de Velazques podemos observar al actor ejecutante siendo parte de la escena expuesta como pieza externa de la cosntrucción interna de su estado visual. Chaplin es uno de los ejemplos mas claros de este tipo de construccion escenica ya que su actuar esterno es lo que primordialmente se pone en servicio de la escena, definible como la comedia fisica, estilo en el cual ademas se hace presente el constante desarroyo del accidente como punto de equilibrio de la accion ejecutada y su ejecutante, y en su suma, la concecuencia directa que proboca la comedia, Velazques sucede a modo accidental en el lienzo expuesto pues seria talvez un error o accidente la optica que devela lo sucedido tras el lienzo, lo que es revelador e insidente hacia una intimidad con el ejecutor, del mismo modo en la escena del comediante fisico es posible vernos alejados y en el total externo, debido a la gran area de espectro puesta desde sus acciones, pero en comediantes fisicos que observamos en subtextos dramaricos articulando el texto desde la comicidad es aun mas rebelador, es el caso de Roberto Benigni en "La Vida Es Bella" una de las escenas mas comicas corporalmente y mas tristes argumentalmente, el ejecutante desarroya una caminata en diagonal, marcando una satiresca marcha militar acompañado por dos militares reales, el en su calidad de prisionero mantiene la idea del juego, haciendo un imposible en la lectura del externo para la compresion del drama interno, lo cual es rebelado al ver la en la escena la presencia de ajentes que en correlacion con el ejecutor detonan la tension escenica, el ver distante la mirada de su pequeño hijo que debe asumir el juego de una perdida irreversible. El actor en la escena debe sostener con limpieza su participacion con el interno, tanto como con el estado externo del lector que aun en su sitio debe en uno o el otro caso olvidarse de lo irreal.

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